
La solución consta de la implementación de una herramienta que protege de múltiples ataques al servidor de aplicaciones web en el backend. De esta forma se garantiza la seguridad del servidor web mediante el análisis de paquetes de petición HTTP / HTTPS y modelos de tráfico, en donde será analizada y examinada cada petición enviada al servidor, antes de que llegue a la aplicación para asegurarse de que no sean maliciosas.